'ALBRICIAS Y MELOCOTONES'. Vodevil canalla



CRÍTICA DE TEATRO

'Albricias y melocotones'
Autor y dirección: Tete Cobo
Compañía: TurliTava Teatro
Off de La Latina (Madrid)

Imagínense que asisten a una revista de las de la España tardofranquista, con su transición, y se encuentra que las 'vedettes' se dedican a hacer un 'détournement' situacionista, valga la redundancia. Que Norma Duval y Bárbara Rey, a la vez que sueltan frases picantes e insinúan carnes, van lanzado torpedos hacia la linea de flotación de la concepción que tenemos sobre cómo miramos a los otros y sobre cómo somos mirados, cuestionando la imagen que tenemos que proyectar y representar para ser aceptados. Torpedos que atinan especialmente, y con más carga, en lo que se refiere a la mujer.

'Albricias y Melocotones' se presenta como un trampantojo. Lo que en un principio parece un divertimento (y si el espectador no quiere ir más allá funciona muy bien como tal), es, en realidad, una deliciosa comedia crítica y ácida contra este sistema que exige la sonrisa y la alegría continua, el estar siempre perfecto para venderse como producto.

TurliTava apuesta por un giro estilístico y temático en su trayectoria. Si hasta ahora se había centrado en el qué somos, en reivindicar a los olvidados y la memoria para plantearse hacia dónde ir, ahora se pregunta sobre cómo miramos, qué queremos ser y cómo queremos estar. Para ello se lanzan con una comedia que va desde el absurdo, piensen más en Faemino y Cansado que en Beckett, a gags más físicos, pasando a veces por un humor grueso del que salen con elegancia. Como si  Lina Morgan hubiera viajado a Italia para ponerse en manos de Fellini y la cosa hubiera funcionado (y Fellini tuviera conciencia feminista).

El montaje funciona como un collage, como una serie de fragmentos que, sin embargo, gracias al gran trabajo de Tete Cobo en la dirección, están bien soldados y gozan de coherencia escénica, sin que ninguna escena aparezca aislada o fuera de sitio. Es verdad que las escenas más líricas no tienen tanta fuerza como las restantes, pero este hecho en ningún momento hace que se resienta el ritmo de la obra en su conjunto. A esta unión contribuye el espacio sonoro, donde se suceden numerosas canciones que conforman una gran banda sonora ecléctica, como si un DJ estuviera atento a las reacciones de las dos actrices y fuera acertando con el ritmo y tono necesario para cada escena, desde Azúcar Moreno a Queen.

TurliTava sigue investigando con los espacios no escénicos y plantea un montaje que se mueve por toda la sala. En este caso, el espacio escénico no ayuda, al estar dispuesto para representaciones a la italiana, ya que el montaje intenta huir de ese corsé, implicando al público dentro de el espacio. Para ello han prescindido de cualquier escenografía, apenas dos banquetas de plástico, y el trabajo recae, además de en el espacio sonoro, en la presencia y el gran trabajo de las dos actrices, que logran ir de lo sutil a la exageración, del ataque directo al silencio y la duda. Victoria Peinado Vergara y Patricia Domínguez intercambian ágiles diálogos y ejercen de maestras de ceremonia y guías de un viaje hacia un poco más allá del espejo. 

Mención aparte se merece el vestuario que viene a sustituir la ausencia de escenografía. Son dos vestidos de corte sencillo que tienen la cualidad de irse transformando en distintos ropajes a voluntad de las actrices, que se van transformando así en cada escena.

'Albricias y Melocotones' es una apuesta arriesgada, ya que plantea un humor en el que hay que hilar muy fino para no caer en lo chabacano o en el chiste fácil y TurliTava lo consigue. En estos tiempos que se ven numerosos montajes que tienen el freno de mano echado y que apuestan a lo bonito. Tete Cobo crea un texto que no busca embaucar al público y además lo hace a través de un lenguaje sumamente popular y con la intención de que se divierta.  Es un texto manejado y retorcido por actrices que gozan de libertad para ir modulando intensidades e intenciones.

De lo popular a lo clásico, de Imperio Argentina a Lope de Vega, de la música de cámara a la banda sonora de unos dibujos animados. 'Albricias y melocotones' es una comedia que viene a  plantear la forma en que se mira y se quiere ser visto, esa dicotomía entre imagen pública y privada, una carcajada contra la objetivización  de los cuerpos. 

Es, en definitiva, una comedia que apuesta por buscar la carcajada, una risa que en muchos casos es nerviosa, de autodefensa. Una verbena popular en la que los vecinos bailan como si nadie les viera. 

BENJAMÍN JIMÉNEZ

Publicar un comentario

0 Comentarios